Escuchen a Carrió

12 respuestas to “Escuchen a Carrió”

  1. Arturo Bandini Says:

    Magistral. Ésa es la correcta forma de razonar si lo que se quiere es no vivir en el eterno retorno del lamento (nos engañaron) mientras se suceden las etapas de nuestras vidas. Lamento que, en muchos casos, es abierta hipocresía de aquellos que están bien adaptados al sistema y temen perder algo de lo que les provee («lo que dice me da miedo», le dice Grondona, aún cuando reconoce que lo que escucha es cierto. Está claro que no solo a él le da miedo). Por ello apuestan, más que al cambio, al recambio, o a la limpieza superficial. De esa forma se contribuye con el status quo sin pagar las consecuencias intelectuales e ideológicas de apoyar abiertamente una aberración que no es sino sistémica y sistemática.

  2. Montañés Says:

    Gloriosa esta mujer. Del linaje de los héroes. Cómo no amarla.

  3. Kevin Says:

    El final de Carrió lo resume:
    «La clase política es de una torpeza…, es de un nivel cultural, es de un chantismo». Así es también el pueblo argentino y Carrió es demasiado para éste.

    Lo que más me gustó:
    a. A mí no me interesa tener razón. A mí me interesa que no nos roben más.

    b. A nadie le va bien cuando acumula tanto dinero y roba a su pueblo. A nadie le va bien por tener plata. A la gente le va bien por tener dignidad. Una vez que te compraste un auto; ¿y después?

    c. Los que forman parte de las opciones son todos corruptos.

    d. Cristina en el fondo es una mujer inmensamente débil, con una fortuna enorme, que está en la locura final. (Unan esta frase con la que dice al principio:) «En el fondo es la venganza de su fracaso. Acá no va a quedar nada».

    Lo único que no entiendo de Lilita es su fe y esa esperanza de la que yo carezco; pero eso no lo entiendo de mucha gente. Por todo lo demás, yo siempre digo que Carrió le habla y le habló a un pueblo corrupto y desinteresado, servil e idiota; por eso han hecho y dicho todo lo que hicieron y dijeron de ella.

    Ayer discutí con un señor entrado en años, y k; lo que para mí representa una contradicción ya humana puesto que me es inconcebible un hombre de setenta y cinco años kirchnerista (no se puede haber vivido tanto y seguir siendo tan decididamente estúpido y ciego). Este señor me decía que Carrió estaba loca, loca y re loca. Dije: si todo su argumento para desacreditar a una persona gira en torno al estado mental de ésta, su argumento no tiene valor puesto que no es un argumento. Y, ¡qué bueno es que usted le falté el respeto y se mofe de ella sólo por su salud mental! Jamás podrá hacerlo por otras razones. Los locos pintan como Magritte, filman como Pialat y, algunos, dicen la verdad como Carrió. El único argumento -que no lo es- para desacreditar a esta mujer es su locura. Yo tengo una enorme lista de reales argumentos para desacreditar a la señora presidente, de la que, la locura, quedaría en último lugar. Continúen diciendo que Carrió está loca, algunos continuaremos diciendo que la señora es, y siempre lo será, lo digo en lunfardo, una chorra, y los chorros son chorros, independientemente de su título, profesión y trabajo.

    Este video es terrible. No sólo por lo que dice Carrió. Mariano Grondona lleva años en la televisión argentina y aquí uno puede ver que realmente ya es un hombre grande, se perciben algunas dificultades, mínimas, en el habla, características del paso del tiempo en los hombres. Pero lo que quiero decir es que, hace tanto tiempo que Grondona está en televisión, el mismo tiempo que este país ha perdido en discutir siempre lo mismo. Mañana Grondona no estará, y pasado Carrió tampoco. Pero habrá otra Cristina, otro Grondona y quizás, una Carrió; y así, se nos va pasando la vida y este país siempre sigue igual. Del menemismo han pasado más de veinte años y no se ha aprendido nada. Ayer fue Menem, hoy K. ¿Mañana? Mañana habrá otro, u otra, y entretanto, acá nadie nunca paga. Es una religión argentina. Por eso Carrió jamás será tomada en cuenta, seriamente, porque este país es un circo del que sus habitantes son los únicos responsables.

  4. Kevin Says:

    También Carrió le habla a estos ignorantes por decisión propia, como este señor Peretti; actor y psiquiatra; parece que tantos años de estudio no le han servido.
    Dice: «A los Kirchner yo los vi muy trabajadores, militantes políticos muy laburantes». «Veo que cuando hablan de que este Gobierno es fascista no saben lo que es el fascismo o una dictadura. Cuando se dice eso, es de una necedad o ignorancia absoluta». «Lo extraño es que se indignan mucho con ese programa (6,7,8), pero no, por ejemplo, con lo que pasa en Intratables.
    El razonamiento de este hombre es el de un niño, el niño del que habla Carrió. Hace falta explicar algo más.
    No, Peretti, elija bien sus palabras, no hable de militantes políticos, no se deje invadir por esos vocablos, se nota mucho si simpatía. La ignorancia absoluta es suya, Peretti. Nos indignamos con ese programa porque lo pagamos todos, les pagamos los sueldos a esos tartufos. ¡Rehaga su carrera otra vez! ¡Vaya!
    Gracias Carrió.

  5. Kevin Says:

    Me enteré de esta nota por Perfil, disfrútenla:
    http://hombre.perfil.com/content/blognacho/diego-peretti-cine-cristina-y-dar-n

  6. Diego Says:

    No da mirar el programa de Grondona.

  7. lalectoraprovisoria Says:

    Al contrario. Es muy bueno le programa de Grondona. De los mejores programas periodísticos. Fresco y transparente. No miente.

    Q

  8. irrepetible Says:

    Los programas no mienten, solo las personas.

  9. Daio Says:

    6,7,8 = un programa hecho para mentir.

  10. Kevin Says:

    Y claro que no da mirar el programa de Grondona…, siendo K, ¡obvio! Siendo K no da muchas cosas, lo único que da es tristeza. Y nunca entenderé qué es eso de dar o no dar. ¿No da?, hablé bien…

  11. Diego Says:

    El programa de Grondona es una vergüenza, al final todos los invitados o los comentaristas terminan acordando una mirada de la realidad junto con el conductor. Al televidente Grondona le vende ese paquetito cerrado de supuestos expertos y tipos solventes. Repulsa me daba recordar los momentos de humor que tenía el conductor del programa, en los 90’s, con el embajador de Portugal que llegaba con su moñito en el cuello y sus bigotes peinados.
    Es un programa hecho para bajar línea.
    Esto sin entrar en la específica mirada que tiene Grondona de la política argentina.

  12. lalectoraprovisoria Says:

    Reconozco que es no apto para progres con un balde en la cabeza. Pero sigue siendo un buen programa. Uno sabe lo que piensa Grondona, no lo oculta, invita a sus amigos y todo es muy civilizado. ¿Qué querés que ahí también vayan personajes cono Peretti aa provocar? Hay al menos diez programas a los que Carrió no es invitada nunca. Me alegro de que Grondona le de media hora.

    Q

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