Brasil (0) – Venezuela (0)

Copa América (8)

por Quintín

Hace tiempo que Venezuela no es un equipo ingenuo, al que se le puede ganar con la camiseta o llevándolo por delante. Es más, es uno de los pocos países del continente del que salen jugadores, tal vez porque desde muy temprano se desarrollan fuera del país. Esta selección tiene desde un muy buen arquero como Faríñez (21) a un glorioso veterano como Rondón (de apenas 29), más otros jugadores altamente competentes y con trayectoria internacional. Y hasta un enano de 21 años llamado Soteldo que, cuando entra, es de lo más atrevido que se vio últimamente. Un equipo que sabe lo que hace, que juega un 4-3-3 muy atrasado o, si se quiere, un 5-4-1 pero sin renunciar a tenerla de vez en cuando y buscar un contragolpe.

Hace tiempo que Brasil no es un buen equipo y si ha logrado disimularlo en la era Tité es por la existencia de Meymar da Silva Santos Junior, un jugador fuera de serie que no está presente en este torneo. Por supuesto que los jugadores brasileños tienen técnica, tienen potencia, tienen velocidad, pero ninguno está en una plenitud de crack. Dani Alves tiene 36 y está un poco pasado. Gabriel Jesús tiene 22 y todavía está verde, aunque no llegamos a ver su verdadero potencial. El resto del talento está atrás.

La cuestión es que este Brasil, con Firminio y Coutinho bajos, con Richarlison jugando como en el Everton (muy discretamente) y Neres haciendo jugadas mecánicas, con Casemiro y Arthur incapaces de crear algo interesante en ofensiva, es un equipo al que le cuesta mucho ganarle a un contrario bien plantado atrás como Venezuela. Es cierto que tuvo alguna jugada de gol aislada, pero Venezuela neutralizó la mayoría de los ataques brasileños sin demasiados esfuerzos.

Quiero decir algo a favor de Tité. Primero lo sacó a Richarlison para incluir a Gabriel Jesús, que le dio otra penetración y estuvo a punto de definir el partido un par de veces. Después mejoró la calidad del medio con Fernandinho en vez de Casemiro y, por último, hizo entrar a Everton que fue más incisivo que Neres. Creo que Tité ve bien los partidos y hace lo que tiene que hacer. Hoy no le alcanzó.

Llegamos a los dos goles anulados, supuestamente por el VAR. El segundo es muy claro y creo que el juez de línea se dio cuenta de que Firmino había desviado el tiro de Coutinho estando adelantado. El primero se puede discutir hasta el mes que viene, con o sin VAR: ¿Villanueva rechazó y la pelota fue a Firmino que estaba dos metros adelantado o simplemente fue un rebote? De acuerdo a la ley actual, en el primer caso era gol y en el segundo no. No podría expedirme en un sentido o en otro. Por eso el VAR no fue de gran utilidad. La vieron diez veces y decidieron una cosa que bien pudo ser otra.

Lo que sí puedo decirles es que, antes de que la FIFA empezara a embarrar las reglas y convertirlas en mamarrachos contrarios al espíritu de juego, el gol hubiera sido legítimo porque cuando Jesús patea por primera vez, antes de que la pelota pegue o sea jugada por el defensor, Firmino estaba en una posición completamente pasiva, sin interferir a un contrario ni querer sacar partido, y luego recibió de un contrario (en la época en la que las reglas eran sabias, no tenía ninguna importancia que fuera rechazo o rebote). Era gol y listo.

Pero todo el mundo sigue hablando del VAR, porque de fútbol se puede hablar muy poco. Brasil se fue abucheado.

Foto: Flavia de la Fuente