Basado en el cuento “El collar”, de Guy de Maupassant
por Simón Rubinstein
Me olvidaron cuando me caí del cuello de la señora Loisel.
En la fiesta yo era adorado, todas las pulseras me admiraban, pero ahora el chofer de este carruaje ni siquiera me presta atención.
El carruaje se detiene. El chofer se baja. Limpia el coche. Finalmente me ha encontrado y según lo que dice me llevará con su mujer.
Ella se quiere divorciar porque el marido nunca le da nada lindo. Pero llegué yo e hice que ellos vivieran felices. Bueno, al menos un poco más felices de lo que esperaban ser.
Foto: Flavia de la Fuente
La lectora provisoria 
junio 24, 2013 a las 2:30 pm
Me encantan tus cuentitos, Simón. Son preciosos. Quiero muchos más!
Besos desde San Clemente,
Flavia
junio 24, 2013 a las 3:10 pm
¡Es muy lindo!
junio 24, 2013 a las 3:44 pm
Si es cierto que en literatura crear un clima es tanto mas dificil cuanto mas corto es el texto, los ejercicios de Simón son sin duda efectivos. Y además uno cree imaginar el proceso detrás de estos cuentos, encontrar ideas, personajes, formas de transmitir … Me alegro que alguien tan joven tenga esta inquietud. ¡Muy bien!
junio 25, 2013 a las 7:44 pm
Muy buena la brevedad de tus frases.. Me encanta esta veta nueva. Espero mas.
La abuela Norma