Haití

Patrimonio de la Humanidad deshumanizada: mi homenaje

por saneduardoclon

Agua, alimentos, habitáculo,
orden, medicinas, clamor de siglos.
Dios ha muerto aquí,
sin dudas,
por miles y aplastados.

Hedor, deambulación,
lloros, gemidos, arrebatos,
tristeza de saber que ya ha sido,
sigue, seguirá,
en otros lados
con distintos estilos
y decorados.
Es cuestión de tiempo, lugar;
todo llega.

Es así,
la pobreza infinita producto humano,
no se lleva bien con calamidades
que saca a veces la Madre Tierra.

Desgracia aleatoria
tal vez,
o con un destino asignado.
Pega en el ojo de la culpa,
pega tanto
que saca lágrimas,
recitales,
alimentos no perecederos,
socorristas verdaderos,
enjambre de marines,
funcionarios piadosos,
periodistas diligentes.

Esa Naturaleza humana disfrazada de
olvido, indiferencia y suerte
que se llama hoy terremoto,
no está sola.

Hay otras naturalezas símiles,
sin magnitud de escala medible
por censores y aparatos.
Hacen epicentro aquí, allá, a poca distancia,
todos los días,
y no hay registro.

No nos tiembla nada material alrededor.
Son imperceptibles.
Guardan fluctuaciones
en bibliotecas, estadísticas,
power point para Naciones Unidas,
ambiente relajado,
puntero de rayo láser verde
señalando, explicando a sus colegas.

Porque cada vez son mayores
los expedientes de expertos,
pronosticadores,
organizaciones,
adivinos,
leedores del futuro.

Otros me calman,
aseguran,
que no hay desastre
que destruya el conocimiento inteligente.
Universo con paquetes de información
muestran entonces, a veces,
el descarte,
la basura burbujeante
en esa papelera de reciclaje
del ignoto planeta Tierra.

Cuestión de peso para los estantes
que acumulan
periódicos, libros y papers.
Inundarán redacciones, foros
prensa amarilla, todo vende.

Lo visual
no aligera mis problemas.
Instantes televisivos desgarrantes.
Recuerdo
el guante dado vuelta,
esos resplandores difuminados,
esa Guerra del Golfo.
Distintas coberturas.

No creo que le duela al sistema.
No creo que detenga su marcha,
No creo en la piedad del poderoso.
Aunque para tapar la hipocresía,
se aplica analgesia in situ,
ayuda humanitaria heroica.
Ahora y no Antes.
Ahora y no Antes, por fin me doy cuenta.
Tiempos distintos, gramática no sustentable.

No existe el pasado para estas cosas,
si no vienen en el combo descripto.
Señores:
solo hay un presente absoluto,
para desposeídos sufrientes en catástrofe,
si es enfocado, con suerte,
por la lente
de noticias globalizadas.

Entendamos entonces, los cadáveres apilados
obstruyendo en las pocas carreteras, la ayuda humanitaria
como señal de protesta.
¿Eso es barbarie?
¿Esa es la herencia solo de Francia, Duvalier, los Tonton macut o el exquisito retrato de Cantet?

En otras partes se utilizan sofisticadas sentadas
frente al Capitolio,
otros queman neumáticos en puntos neurálgicos
o radicalmente algunos se inmolan.
Siempre hay daño, colaterales y centrales. También señalamiento.

Pero en este caso, parece distinto.
Aquí está condensada la acusación fílmica,
donde sobran las palabras.
Nunca invadieron otros pueblos,
nunca cotizaron en bolsa,
nunca oímos sus gritos.
Ejemplo a no enseñar,
improcedencia académica.
Bolsones de parias humanos desprotegidos,
ese mundo invisible en acto,
recorriendo la miseria, ahora sobre sus escombros.

Pisaron la raya de lo tolerable,
¿cómo explicar que los acomodados de las sierras, no sufrieron el epicentro ? Dios ha muerto repito, por miles, en las barriadas populosas más pobres.

Y lo señalan televisivamente esos niños,
sentaditos ojos tristes,
hasta que el botón rojo se apague
cámara digital del reportero,
que el expediente no ha cambiado de carátula:
Abandono seguido de muerte.
Está en sus miradas. En el centro de esa vergüenza, dolor y rabia
que no es ajena a la culpa,
no alcanza solo con contemplarla.
Va más allá de lo ideológico,
es tal vez el interrogante más importante,
que tiene responsables básicos terrenales
puntuales,
pero no deja de tener
su costado metafísico,
que no se explican solo,
por desplazamientos tectónicos.

Foto: Javier Legris

8 respuestas to “Haití”

  1. Verdadero Fogwill Says:

    Coca Cola tiene razón: ¡Se necesitan malos poetas!

  2. JorgePayador Says:

    Verdadero Fogwill, por qué tu nick remite a Clarín?

  3. JorgePayador Says:

    Lo de Haití es verdaderamente espantoso. No hay palabras para tanto dolor; la muerte solo llama al silencio.

  4. Filomena Says:

    A mí me gustó. Transmite cosas que por lo menos yo, pienso y no expreso. No expreso por no tener las evidencias…, o no saber cómo…
    Yo creo que a veces, hay situaciones en que la muerte no es tan mala….!! y lo que debe ser me indica: qué barbaridad estás escribiendo!! Gracias saneduardoclon, por prestarme tu voz:
    Y lo señalan televisivamente esos niños,
    sentaditos ojos tristes,
    …. el expediente no ha cambiado de carátula:
    Abandono seguido de muerte.
    ….no alcanza solo con contemplarla.
    Va más allá de lo ideológico…
    ….no se explican solo,
    por desplazamientos tectónicos.

  5. capitán calixto vergara Says:

    nunca nos hemos preocupados por ellos, y ahora lloramo sus muertos…

    ay,argentina, pais en el acabose, si alguna vez tuvo iniciose

  6. Eugenio Says:

    Fogwill sos lo peor! (y te gusta serlo)

  7. Fernando Says:

    A propósito del tema, me molestó bastante un chiste de la revista Barcelona en tapa que vi estos días.

  8. saneduardoclon Says:

    «Por última vez, pues, el 11 de abril, ni resignado a morir ni angustiado por la muerte, sino furioso, extraordinariamente irritado por la idea de que pronto ya no estaré aquí, en medio de la belleza del mundo o, por el contrario, en su grisácea insipidez -que en este caso concreto es la misma cosa-, por última vez, diré lo que creo que tengo que decir».

    Jorge Semprún
    Buchenwald /
    11 – abril- 2010

    Recomiendo este articulo, en el suplemento Zona de Clarín.

    Juan Cruz lo recrea aquí, nuevamente . Pueden leer en El País su anterior versión: » Donde han ido los pájaros de Buchenwald » .

    ( En el vórtice del dolor infinito, entre la belleza del mundo y su insipidez; recrea furioso la finitud de su palabra. Brillante , metafísico, actual )

    http://www.clarin.com/suplementos/zona/2010/04/18/z-02183120.htm

    http://www.elpais.com/articulo/internacional/han/ido/pajaros/Buchenwald/elpepuint/20100411elpepuint_5/Tes

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s


A %d blogueros les gusta esto: