por Pablo E. Chacón
Hace unos días me enteré de la existencia de una pastilla que hace que los fumadores dejen de fumar. Estoy hablando de gente que quiere dejar de fumar, no de los convencidos que fumar provoca cáncer, que son como esos que creen que si te ponés bizco un día de mucho viento, te podés quedar bizco para siempre. Es decir, no estoy hablando de animistas sino de personas que quieren dejar de fumar porque están cansados de fumar, porque se despiertan con la boca pastosa, porque los pulmones, si respiran profundo, silban como un fuelle roto… en fin, personas que no parlotean como loros, que no dicen el cigarrillo produce cáncer, que Alfonsín resultó un gran estadista, que Menem era corrupto, que Pinto se la come, que Kirchner es la sal de la vida, que las Malvinas son argentinas (siempre fueron británicas) o que Ezra Pound era fascista.
Estoy hablando de personas, no de loros. El loro es hablado por la publicidad, la estupidez, los noticieros, las noticias. El loro es el tipo que –para poner un ejemplo– dice que no todos los policías usan gorro, y se queda tranquilo (y esconde el gorro). Las personas, muchas veces también, pero en ciertos casos no, el inconsciente no la tiene tan fácil.
Bueno, la cosa es que después de un asadito empezó una pelea entre loros y personas, de la que no participé porque jamás en mi vida fumé. Soy una persona (y a veces un loro) sin vicios, no tengo vicios, no tuve vicios, y como soy modesto nunca hablo del largo ni del grosor de la poronga mía ni me inmiscuyo en temas que ignoro. Pero me llamó la atención lo de la pastillita y pregunté. Sí, es como esa que te saca la timidez, dijo una glotona que seguía masticando mientras unos decían que la pastillita hace efecto un tiempo y después volvés a fumar, con más ganas, más pasión y cero culpa, y los que decían que sí, pero que a fumar afuera, que hay chicos y que pastilla ni un carajo: afuera … lo curioso era que estábamos afuera, en un parque arbolado.
Los fumadores que quieren seguir fumando se juntaron a un costado con los que no quieren seguir fumando pero todavía no empezaron con la pastillita y yo me quedé entre los loros, algunos ex fumadores.
Entonces arranqué la filípica, que nuestros chicos, que el hambre, que el paco, que en un escenario como el que observamos, vacío de palabras, vacío de ideas, donde no hay partidos políticos sino concertaciones, donde la gente de la cultura se preocupa por ver si continúan sus festivales y no si se mueren los tobas de Chagas y juntan firmas con objetivos ridículos en vez de decir fuerte, a los gritos: ¡no queremos familias durmiendo en la calle, no queremos ministros chorros, no queremos pedantes hablándonos del PBI mientras la gente no puede comprar papas, no puede comprar tomates, no puede comprar arroz, no puede comprar arroz partido, ¡no puede!… y ustedes ocupándose del precio de los cigarrillos y si este año habrá o no festival de cine. Por favor. Los loros escuchaban, silenciosos, al contrario que los loros, pero es que era tan cierto lo que decía que alguno amagó pero como nadie acompañó (son bandadas de loros), se quedó en el amague en lugar de decir, “che, tío, ¿no podrás dejar de hablar giladas?, ¿qué nos viste, cara de boludos?, así que seguí, total… que Alende, que el maestro Alfredo Bravo, que Augusto Conte, que Alfonsín, Alfonsín, sí señor, a quien le debemos la incorporación a nuestro lenguaje de varias palabras como democracia y derechos humanos, y si se lo critica porque tuvo que negociar con Aldo Rico, bueno, hay que entender, fue por el bien de todos, y si tuvo que negociar con Duhalde, también fue por el bien de todos, de la patria… o acaso Kunkel no cerró un acuerdo con Rico también? Alfonsín negoció para que no volvieran los milicos, viejo, pero claro, como ahora está de moda pegarle, decir que está viejo hecho un viejo choto, que toma Rutini, ¿y qué quieren que tome, tetrabrik?
En una de esas se sentó el Cholo. Es una pena, dijo el Cholo, es una verdadera pena, Argentina es un país de insulto fácil, todos son asesinos, todos son corruptos, todos son narcos, los canas son todos asesinos… ¿qué querés que te diga?, ¿cómo decirlo?, me hacen acordar a esos machistas que dicen todas las minas son putas, menos mi vieja y mi hermana.
Y cuando la cosa llegó a ese punto, se sentó otro, Ricky, con autoridad de patotero de asamblea, prendió un faso, impune y echó, despacio, el humo sobre el silencio de los loros, desafiante: acá lo que nunca se dice, lo que no quiere entenderse es que desde 1983 hasta que llegó Kirchner, durante veinte años, ¡veinte años!, el peronismo estuvo situado a la derecha del proyecto alfonsinista. El peronismo, cuando Alfonsín era gobierno, se dedicó a boicotear cuanto proyecto tuviese algo de progresista, empezando por el aval a la autoamnistía militar, siguiendo por la ley de democracia sindical, la solución de los conflictos con Chile, el seguro nacional de salud, la ley de divorcio… y ni hablar de la década menemista, ni hablar (ya estaba cebado, ordenó a los gritos unos mates y dale que va): el peronismo, sí, el peronismo avaló el saqueo del estado, la política de indultos, no sólo a Videla y compañía, también a los carapintadas, y justificó la identificación plena con el Vaticano y la destrucción de todas las conquistas sindicales. El peronismo fue el que armo alianzas con lo peor del liberalismo procesista, con los golpistas contra la democracia (¿o qué mierda era Aldo Rico?) y hasta con Patti, el torturador, Patti. El silencio se hizo hondo, profundo. Ergo, dijo Ricky, la política del peronismo durante los primeros veinte años de la democracia, no sólo estuvo a la derecha de Alfonsín sino incluso del Papa, quien al menos, y no importa por qué, condenaba las políticas liberales. Y paráparáparápará!!!!, porque yo, como vos, como mis viejos, como todos, ¿sabés que quiero yo?, alpargatas quiero, y libros, libros también. Pero irrita, ¿sabés?, irrita que ante tanta miseria, tanto chorizo en el gobierno, los cinéfilos no puedan pensar en nada más que en un festival y en un canal de cable que es una bosta, loco… déjense de joder, muchachos, paseen un rato por el conurbano, este país está hecho de goma… y que quede claro: yo sólo salgo a la calle por la Amia, por la embajada, por los aprietes de los Fernández a los medios de prensa, por los tobas chagásicos, por el señor que duerme en la esquina de mi casa todo cagado e infectado, por las criaturas violadas que abren las puertas en Constitución… ¿soy cursi?, ok, sí, soy cursi.
Entonces, con el ambiente cargado, empiojado y reventado, me levanté, empecé a caminar, solo hacia la entrada del parque, encendí un porro y le pegué una calada bien prooooofuuuundaaaaaa hasta que miré el cielo y creí ver al búho de Minerva levantar la majestad de su vuelo.
Foto: Montes-Bradley
noviembre 21, 2007 a las 7:45 pm
El avión Buenos Aires-Río Cuarto fue bautizado Alí Babá y los Cuarenta Ladrones por los riocuartenses durante el Gobierno de Alfonsín. Conrado Storani, Secretario de Energía, había llevado al gobierno entre otros a los riocuartenses: Valentinuzzi, Cendoya, Ottonelli y otros que ahora no recuerdo el nombre. Todos ellos pasaron en 3 o 4 años de clase media venida a menos a multimillonarios en dólares. Cuando se instaló el Tren de la Costa muchos riocuartenses que iban a Buenos Aires lo tomaban para ver la casa de Conrado Storani en San Isidro valuada en dos millones de dólares -desde el tren se ve claramente- Había un banco local en Río Cuarto, el Banco Popular Financiero que concedió préstamos millonarios a conspicuos radicales y luego, siendo Presidente del Banco de Córdoba, Cendoya, asumió las acreencias del Banco Popular, manejado por radicales de Storani, y las licuó con el aval del Gobernador Angeloz. Y hay mas, muchísimo mas, sobre el gobierno de Alfonsín que te pondrían los pelos de punta.
noviembre 21, 2007 a las 8:26 pm
Blaquier, por casualidad, tenés algo que ver con el azúcar de los ingenios de Jujuy?
noviembre 21, 2007 a las 8:34 pm
Don Blaquier, ese cuento ya me lo contaste en Noviembre 19, 2007 a las 4:14 pm en el otro post.
Qué gracioso que tengas tan claras las rapiñas de los radicales y tengas tan norradas las de Menem; yo que vos me controlo el Alzheimer.
noviembre 21, 2007 a las 9:23 pm
Dos veces por semana,por la noche,hago el trayecto San Martin-Avellaneda. Uno de esos dias, me alcanzan en coche hasta Villa Crespo,y me tomo un bondi. Once de la noche,aproximadamente. En Once, Pasteur y Corrientes, màs o menos es impresionante la cantidad de personas y de camiones juntando plàstico, cartòn, y subiendo todo a unos camiones que es increible que no vuelquen.Cuando llego al microcentro,apenas pasando Plaza de Mayo,hay una esquina en la que tambièn se acumula cartòn, vive una familia,y un nene que tendrà ocho años hace malabarismos con tres pelotas de tenis, que deben ser el objeto màs parecido al poder que toca. Lo demàs es basura.El panorama es el mismo por San Telmo, y por la Avenida Patricios y en el centro de Avellaneda.
Otro de los dias vuelvo en tren con un compañero de laburo (sola me da miedo), y en ese caso,gracias al Tren Blanco la mugre y la gente que come porque junta basura pasan a una velocidad que los hace imperceptiles.Un detalle: el Tren Blanco no tiene luces encendidas.Es totalmente oscuro. La basura viaja, pero no se muestra. Como Macri quiere manejar este tema de la basura, el año que viene minga de tren blanco,y ahi agarrate catalina. Algo huele a podrido, y no en Dinamarca…
Pablo, excelente post. Y por si se asoma,mis saludos a postiglione, al que le dieron como en bolsa…
noviembre 21, 2007 a las 9:26 pm
Error de redaccion: repeti camiones.Hoy me tocò el peor teclado del mundo y eso me altera. La semana pròxima serà distinto…
noviembre 21, 2007 a las 9:31 pm
Los loros no mienten.
noviembre 21, 2007 a las 9:36 pm
ERRATA : «norrada» = mezcla entre borrada y negada.
noviembre 21, 2007 a las 10:16 pm
Pablo, muy bueno. La diferencia entre posts como este y las Aguafuertes porteñas de Arlt es que éste jamás confiesa (al menos por escrito) que sublima sus frustraciones prendiéndose uno.
noviembre 21, 2007 a las 10:49 pm
Muy bueno el post… me saco el sombrero. Es difícil escribir un comentario sobre una licuadora de comentarios como esta.
Lo que más me gusta es que la anécdota suceda en un parque plano, sin perspectiva.
noviembre 21, 2007 a las 11:23 pm
Aunque es mas fácil decir «el loro de alfonsin» que «la cotorra de cristina», me gustó la nota, pero no me quedó claro lo de la poronga; en mis tiempos aprendí que así se le dice al mate, pero no se si estabas hablando de eso y me parece que tampoco se si quiero saberlo.
noviembre 22, 2007 a las 8:48 am
Pablo, como dice Gabriel David (el de nombre de teleteatro), tu relato, licuadora de comentarios en parque plano, está muy logrado. La verdad es que me diviertí mucho leyéndolo, imaginé perfectamene la escena y a cada uno de los loros y no loros.
Una mezcla entre aguafuerte porteña y monólogo de Tato Bores.
Me encantan las filípicas.
Y lo de que Argentina es un país de insulto fácil.
Y los fumdores, como leprosos, a la vera del camino.
¡¡Buenísimo!!
noviembre 22, 2007 a las 9:26 am
Pablo con todo respeto si te molestan los cinéfilos que hablan del festival y del canal de cable que es una bosta me parece que te equivocaste de asado.
noviembre 22, 2007 a las 9:36 am
Niembro les parece un loro??
El lunes de la semana previa de las elecciones estuvo en el programa de Mirtha sacandole (ambos) mano a Alfonsin porque los habia prohibido, y dale que te dale
El miercoles pongo el programa radial de don Fernando, «Estamos aquí en la casa de ¿don raul, lo puedo llamar, asi, no?» «Desde luego», se escucha esa voz que supo mover a millones; «Para entrevistar a un dirigente que no necesita presentacion…»
¡Buenisimo!
noviembre 22, 2007 a las 10:05 am
La reivindicación de AlfonsínMenemDelaRuaDuhalde es tan discreta que no dá ni para la remera estampada. Out. Pronto busto y nombre de calle y a archivar.
noviembre 22, 2007 a las 10:29 am
¿De que Alfonsin? ¿De que Menem? ¿De que Dual de? ¿De que De la Rua? ¿De que Kirchner? Yo pensé que era el mismo en estos últimos 24 años. Ni que hablar de los de antes. ¿democracia? Un principio fundacional modernoso que nunca supimos, quisimos o tratamos de conocer. La dispersión del discurso hace a la magia del relato de Chacon. La palabra hecha coherencia desde la figura del loro. Aguda contradicción.
noviembre 22, 2007 a las 11:14 am
Janfiloso
El mate es PORONGO. Así que imagínese
noviembre 22, 2007 a las 11:54 am
Pía: cómo es eso de «hoy me tocó el peor teclado del mundo…»
¿Escribís desde un Cyber?
¿Pero esta gente duerme adentro de uno?
Y yo que me creía un obsesivo por escribir mucho (o poco, según se vea) desde mi casa. ;)
Desde aquí me saco el sombrero por los comentadores de LLP que postean desde locutorios.
Eso denota amor por la escritura y por el blog.
Lo digo sinceramente y sin niguna ironía.
noviembre 22, 2007 a las 1:33 pm
A mí el post me parece vergonzoso. Y el resto de los comments que lo festejan también.
¿Qué les pasa?
En este post Chacón defiende, con su estilo confuso, liviano y un poco tramposo, una postura muy dañina que consiste en poner a la cultura (o por lo menos algunas de sus manifestaciones) por un lado y a los problemas sociales más graves (hambre, pobreza, etc.) por el otro. Pero justamente la cultura, entre muchas otras cosas, es la manera que tiene la sociedad de pensarse a sí misma y de pensar los problemas que tiene (entre ellos el hambre, la pobreza, etc.) y de ver cómo es posible resolverlos.
Si el BAFICI te parece elitista o si te parece que no está ocupando el lugar que debería o lo que sea, argumentá en esa dirección, pero quejarte de que mucha gente esté peleando por mantenerlo mientras «los chicos se mueren de hambre» me parece realmente de cuarta.
noviembre 22, 2007 a las 1:40 pm
coincido con galois:
pía es bárbara, me cae genial, por el locutorio y por muchas cosas mas.
te banco a muerte, nena.
noviembre 22, 2007 a las 3:02 pm
No me cierra la contradicción Bafici-hambre, puedo entender a que apunta aquel que la exhibe pero me parece una falsa opción. Sin embargo, a lo que quería ir era al tema Alfonso. A mí también me parece injusto que se lo putee, yo no lo haría, porque lo que siento por él más que ira es dolor, pena por una esperanza que no pudo ser, porque más allá de la oposición por derecha del PJ, al tipo se le creía, se le creyó y tenía un consenso como después no ví hasta hoy, tuvo de entrada el respeto de algunos que incluso no lo votaron. El punto es que, claro, desde la realpolitik se puede acordar con Rico, o con cualquier otro, pero si vos tenés un discurso, como se apunta bien en el post, de derechos humanos y democracia y tu poder no se basa en el punterismo sino en tu coherencia o lo que pregonás como tal, no se te perdona después el Felices Pascuas. Creo que ese es el punto de inflexión de su gobierno, es claro que no era una situación sencilla pero, desde el 83′ para acá fue el primero de los acontecimientos en donde los dirigentes no priorizaron la voluntad de los representados. Desde ahí todo fue para peor. Es muy difícil explicar a Menem sin hablar de la debacle del gobierno de Alfonsín
noviembre 22, 2007 a las 3:08 pm
¡Bien Chacón!.
Que se paguen los vicios culturales. Como la gente los puchos. Si son tan democráticos porque no piden una consulta popular para que la ciudadanía vote por sí o por no al presupuesto para su tiendita de la cultura.
Les dirían no seguramente.Ni la necesitan;no les resulta necesaria y es arbitrario que les deduzcan del ticket del supermercado los sueños artísticos de quien se autoerige como voz poética con chapa oficial.
Porque la cultura argentina de la que viven los operadores culturales no se hizo con subsidios o partidas del tesoro nacional.
La gente comía y trabajaba y después con su plata apetecía el «consumo cultural » que se le cantaba.El patio, la sociedad de fomento, la pieza de la casa solariega no sabían de movidas con sellos de secretarías.
noviembre 22, 2007 a las 3:49 pm
Bueno, a mí me parece muy bien pelear por el BAFICI, pero el texto de Chacón no es un ensayo sobre el tema. Es el relato, e n clave de ficción, un encuentro donde se discute (como seguramente nos pasa a todos nosotros), cuando tocamos estos temas en donde varios tienen opiniones diferentes. Está contado con mucha gracia. Y puedo mirarme desde afuera y reírme de mí misma.
Yo vi personajes, cómo pedirles entonces que todos piensen como yo.
noviembre 22, 2007 a las 3:52 pm
Galois, hasta la semana próxima, escribo desde un cyber. Mi hija viene a chatear con sus amigos, garpo dos máquinas, leo mi correo, entro al blog, a otros sitios, etc. La semana que viene ya tendré Internet en casa, y ahí se viene «La Guerra por la Pantalla» con la niña.
noviembre 22, 2007 a las 4:13 pm
Me parece que enarbolar la bandera del hambre en contra de la cultura, a la que no desligo de la educación, es no solo estéril sino peligroso. La urgencia de uno no debiera anular la importancia de la otra. No se puede pensar cuando se tiene hambre o frío, es inapelable; tampoco se puede crecer y ser libre sin educación por más fortificado que esté un cuerpo.
En ambos casos son las decisiones políticas de los gobiernos, los mecanismos de una verdadera participación popular, las que debieran poner las cosas en su lugar.
No hay antagonismo. Hay urgencia. La concentración de la riqueza no ayuda y el efecto derrame y la mano invisible, no existen.
noviembre 22, 2007 a las 4:57 pm
Pregunto… ¿tanta amnesia genera esta manía de intervenir? Los blogs generan un efecto papelera de reciclaje donde al mismo tiempo que aparece algo nuevo se vuelve a repetir lo ya dicho.
Estrella: comparto con vos. Yo también me reconozco a mí mismo y me río, ya que se alude a algún comentario mío. Es un espejo deforme y también puedo transformarme en loro como un samsa de cyber-café. También Pablo ha sufrido esta incontinencia plumífera y licuando sus propios comentarios se podría generar algo diez veces más divertido. Aunque también reconozco mi “pluma” en la idea de que los comments constituyen un continnum, idea que creo recorre todo el relato. Y también en la idea de chusmerío ordenado en que cae el debate y no solo de blog, aunque ando casi por los dos atados por día.
El porro vendría a operar una discontinuidad. Las ideas que discuten los personajes son puro copy paste, son lo de menos.
noviembre 22, 2007 a las 6:57 pm
Buenas,
El artículo de Chacón y los comentarios de «El Cholo» y «Ricky», son una copia más o menos textual de comentarios que envié yo a «Carta abierta al ministro misterioso», un artículo publicado hace pocos días en LLP.
En un determinado momento, Gustavo Postiglione dijo textualmente: «cada día que pasa me siento más peronista y LLP me da la razón», a lo que yo le pregunté a qué venía eso y le hice un racconto de posturas del PJ (expresión política del peronismo) durante el período 1983-2003.
Saludos
noviembre 22, 2007 a las 7:54 pm
La pastilla que ayuda a dejar de fumar lo único que hace es elevar en el cerebro los niveles de un neurotransmisor llamado dopamina, al igual que lo hace la nicotina, sin los efectos secundarios graves de esta última.
Las Islas Malvinas fueron argentinas, hasta la expulsión de su gobernador de apellido Vernet, por parte de una unidad de la Armada Británica .
No saben de economía, desconocen la historia, seguro que creen en los Reyes Magos.
noviembre 22, 2007 a las 8:21 pm
Buenas y permiso.
Luego de la lectura del texto y los comentarios me surgieron varias preguntas, muchas más que certezas,por cierto. La primera, y creo yo, mas movilizadora es ¿por qué nunca se pone en la balanza,cuando juzgamos a un dirigente, la actitud del votante? Y luego ¿no se recurre demasiado a deslindar responsabilidades sólo en las figuras políticas de turno?. El «Felices Pascuas» de Alfonsín es doloroso para quienes lo apoyaban, pero no estiendo,por ejemplo, el apoyo que no muchos años despues reciben fihuras como Patti y el mismísimo Rico.
PD: celebro la detensión de Patti.
noviembre 22, 2007 a las 8:38 pm
El Cholo soy yo, no el que escribió antes.
noviembre 22, 2007 a las 10:27 pm
Sí, claro, ahora todos quieren ser el loro de Alfonsín … acuerdo con Kay: creen en los Reyes Magos (y en las Felices Pascuas).
noviembre 22, 2007 a las 11:45 pm
bien, arnulfo. adhiero en todo.
sos guebel?
noviembre 23, 2007 a las 2:31 am
Tal como apunta Boudu en un comentario anterior (y creo entender bien eso, y si no, que me disculpen), considero que alguien como Alfonsín debe ser visto como un personaje histórico. En otro comentario, el de Oriental, señala la traición de Alfonsín con las Felices Pascuas, y ahí, obviamente que hay un punto de inflexión, porque dilapida el apoyo que tenía. El paso siguiente es Menem.
Ahora bien ¿hay que escupir sobre los votantes por lo que hacen sus dirigentes? Y más aún, por lo que hacen varios años después de ser elegidos. De Alfonsín se hicieron cargo sus votantes. Creyeron en él, lo votaron, y cuando empezó a hacer todo lo contrario, dejaron de votarlo.
Mal que le pese a Chacón, así es la democracia, y no está mal que así sea. Lo que no se puede hacer es confundir a un candidato con el sentido de un voto.
En el ’83 había dos candidatos con posibilidades de ganar. Uno proponía juzgar a los milicos y otro dejar todo como estaba. La mayoría (yo incluido) votó al que proponía juzgarlos. Y hubo juicio.
Cuando el tipo se bajó los lienzos ante Rico, la mayoría lo abandonó para siempre y de ahí en más, todo fue un juego, «tumbar a Alfonsín» ¿o no?
Pero no es la historia de Alfonsín, sino la actitud del PJ, que primero no quiso juzgar a los milicos (Luder) sino que después, con Menem, apoyó el indulto a Seineldín, Videla y otros próceres, y luego (dinero mediante), se alió con Rico.
¿Qué tiene de malo decir esto? Son hechos históricos, no parloteo.
Parloteo hubiera sido decir que Alfonsín hizo lo que hizo por el bien del país. Ahí lo tienen parloteando al propio Alfonsín, gagá y que nadie le da pelota, y con un partido al borde de la extinción.
O seguir defendiendo al peronismo como un ente sobrenatural que no existe en ninguna parte y olvidarse de la historia vergonzosa del PJ en los años que van de 1983 al 2003.
Saludos
noviembre 23, 2007 a las 4:27 am
más que guebel parece guerin
noviembre 23, 2007 a las 4:34 am
Ah, nobleza obliga, vi «El Asadito» y me gustó mucho. Espero ver las otras
noviembre 23, 2007 a las 9:31 am
galois yo tambien escribo desde un cyber
noviembre 23, 2007 a las 9:43 am
Todos somos El Cholo
noviembre 23, 2007 a las 10:49 am
Charly W Karl, permitime unas preguntas: ¿cual historia? ¿cual economía? ¿cuales reyes magos?
noviembre 23, 2007 a las 11:43 am
Che, muchachos, ¿ustedes leyeron bien el post? Chacón no dice que Alfonsín es de izquierda o que el BAFICI hay que cerrarlo. Chacón dice que LOS LOROS dicen eso
noviembre 23, 2007 a las 11:54 am
El Cholo,
Si. Y si fuera por mi me ahorraría el busto y el nombre de la calle pero parece que alguna gente cree que esos gestos son importantes.
noviembre 23, 2007 a las 12:13 pm
Medusa: Pues me saco el sombrero de nuevo.
Y vuelvo a decirlo sin ironía alguna.
noviembre 23, 2007 a las 1:05 pm
Además saqué campeón a Estudiantes y ahora me voy a River con el cuchillo entre los dientes. No tengo techo.
noviembre 23, 2007 a las 4:15 pm
Además de policías que esconden el gorro también hay piratas que esconden el loro. Yo grito como vos, como mis viejos, como todos: ¡Me cago en Alfonsín!
noviembre 23, 2007 a las 8:46 pm
cuando miro hacia adelante
siempre hay otro caminando a tu lado
un encapuchado que se desliza envuelto en un manto marrón
no sé si es un hombre o una mujer
pero ¿quién es aquel, al otro lado tuyo?
Eliot, la tierra baldía
noviembre 23, 2007 a las 9:40 pm
! eh ¡ ya lo tiraste; yo te sigo che.
noviembre 24, 2007 a las 12:36 am
Están dañando tu imagen que hace brotar una rosa
en el fondo de mi corazón.
El mal de las cosas informes es un mal demasiado grande
para ser dicho;
Añoro crearlas de nuevo y sentarme lejos en una verde
loma,
Con la tierra y el cielo y el agua, vueltos a hacer, como un
cofrecillo de oro
Para mis sueños de tu imagen que hace brotar una rosa
en el fondo de mi corazón.
W.B. Yeats, de El amante habla de la rosa en su corazón
noviembre 24, 2007 a las 1:51 am
Disculpen la indiscrecion,chaco n y gabriel david son pareja y se están dedicando poemas.es entenercedor…
marzo 31, 2009 a las 10:04 pm
gracias a alfonsin el pueblo argentino volvio a la democracia , fue un hombre bueno y honesto, ojala muchos gobernantes fuesen como el a mi personalmente me dejo un buen recuerdo .