Las cartas de mi padre de Mona Van Duyn
Traducción: Dasbald
1
Una muela ulcerada me mantiene despierto y es tal
el dolor que debería ir al hospital y hacer
que me la saquen o me desangraré debido a las aspirinas que tomo constantemente y que actúan como anticoagulantes,
pero no puedo dejar a tu madre que se cae y además se olvida
de tomar sus antinflamatorios y sus tranquilizantes,
encima sus tobillos están tan hinchados y sus intestinos
funcionan tan mal que casi sufre una estrangulación de la hernia. Cuando
va de cuerpo lo que hace muchas veces es verde como el pasto. Tengo
unos agujeros en mi cadera donde la prótesis de la pierna
la perfora como un sacabocados.
La cabeza siempre me está por explotar por la máxima. Es espantoso no poder salir y encima me caí en el baño
y la muchacha que apenas si puede levantarme.
Seguro que pensó que me había partido la espalda. En cualquier momento va a suceder algo así.
De la próstata estoy muy mal y el corazón ha abandonado,
me agito cada vez que termino de comer. Estoy tranquilo
ya que creo he hecho lo suficiente y no tengo dudas de que
el Señor llegará en cualquier momento trayéndome paz.
Me decís que te gusta alimentar pájaros, pero no veo
la razón de gastar dinero en alimentos para pájaros,
y encima me decís que tenés unos cien gorriones. Yo que vos
los envenenaría deshaciéndome así de posibles enfermedades
y sobre todo de los soretes.
2
Disfrutamos con tu visita, fue un gesto muy lindo de tu parte traer
el cuenco ese para alimentar pájaros pero pensamos que es un gasto inútil el haber comprado esa bolsa de comida ya que seguro no
viviremos más que un par de semanas. Los miramos
desde donde estemos sentados, algunos son grandes otros más pequeños, pero ya sabés que cuando me dedicaba al campo me gustaba cazar y bien que disfrutamos de nuestras buenas comidas con esos pichones y codornices y con los faisanes, pero estos pájaros no
sirven para nada y son muy sucios como para tenerlos tan cerca
de la casa. Sin embargo a tu madre le gustan los Cardenales.
Mi pierna está mal y encima casi no puedo escuchar nada
y mamá dice que está afónica de tanto gritar, pero yo sé
que ya es tarde para algún tipo de cura. Tengo reflujo sabés,
todo el tiempo, y un gusto amargo en la boca y por supuesto
por el estado de mi corazón de qué serviría ir a consultar a un médico.
Tu madre está igual.
Tiene una escara que piensa está por convertirse en un tumor.
3
Los pájaros no dejan de comer y pelearse entre ellos, ¡ja! Salen del monte
cada uno con su forma particular y su color y tamaño que los distingue
pero aún no sabemos cuál es cuál. A tu madre le gustaría
que nos enviaras algún libro especializado en pájaros.
Hay uno al que los vecinos llaman Pinzón de las Nieves y solo
come directamente del suelo,
así que hicimos que la muchacha tirara un poco más donde él prefiere…
¡Pero no sabés cómo comen los desgraciados! Mandé a la muchacha
al pueblo para que comprara más alimento, ya que
tenía que ir de todos modos.
4
Casi te llamo por teléfono
pero como es tan caro mejor preferí escribirte.
Algo curioso, realmente curioso está sucediéndonos, de
repente hay tantos pájaros que cuando se juntan
de tan sobrexcitados que están con la comida terminan peleándose
y no sabés lo raro que resulta estar ahí mirando, así que a veces
algunos vuelan directo hacia nosotros
estrellándose contra la ventana y ¡pum! Los pobres tontos caen desmayados.
Al rato se despiertan sobre el pasto y salen volando.
No ha parado de suceder esto. Ya empezábamos a sentirnos mal con tu madre
sin saber qué hacer hasta que el otro día
una de las señoras de la Parroquia se detuvo camino a su casa
y uno de los pajaritos se desmayó mientras estaba ella,
así que lo agarró en sus manos y lo llevó adentro.
Parecía muerto. Tenía una especie de sombrero
de plumas rígidas sobre la cabecita, medio rosa
o rosa pastel, no sabría decirte muy bien cuál,
así que mientras lo acariciaba con unos golpecitos suaves
volvió a la vida ahí mismo en sus manos y ella lo llevó al patio
y salió volando. Dice que piensan que la ventana es el cielo en un día
claro. Ella también alimenta pájaros pero no tiene
tantos como nosotros que la visiten. Dice que debemos colgar
unas tiras de papel aluminio en la ventana
así que eso es lo que vamos a hacer. Quedó
enloquecida con nuestros pájaros.
P. D. El libro acaba de llegar por correo.
5
La verdad que ese libro está muy bueno. Me he dedicado
a estudiarlo diariamente y así poder disfrutar de nuestros pájaros.
A algunos no hay manera de identificarlos
en absoluto, supongo que se trata de las hembras, y los nombres en latín
directamente me los salteo. Nunca te podrías imaginar los gorriones que tenemos. Nos escribiste acerca del Gorrión Doméstico,
pero aquí tenemos desde el Gorrión Arlequín al Gorrión Chillón y también
el Garganta Blanca, o el Barba Negra. También hay seis Cardenales,
tres pares, que vienen por la mañana temprano y por la noche.
A los muchachos les gusta comer directamente del alimentador mientras
que las hembras permanecen sobre el pasto.
Los Chingolos, hay unos 25, se pelean
por marcar el territorio. Extraño a los Azulejos
desde que el tiempo se ha puesto más cálido, con su pechito
del color de un melón de Castilla. El Carbonero de Cresta Negra
es de una azulado azabache y tiene un mechón simpático en la cresta.
Y también tenemos otros tipos de Carpinteros como el de Pecho Rojo, el americano típico, y el de Cresta Roja. Te morirías de ver a Pecho Rojo
cuando se queda colgado con la cabeza sobre el tronco, la cola
a punto de saltar y las alas abiertas. Y las Calandrias y el Reyezuelo Rubí
y deberías ver a Trepatroncos de cabeza y al Tordo subiéndosele
y al Zorzal con unas manchitas en el pecho,
y el Pinzón que es tan divertido, salta en una pata
sobre el lomo de los otros para obtener la comida.
Hemos comprado semillas de girasol solo para él.
¡Y el Pinzón Púrpura!! Apuesto a que a este no lo tenías!!
Es del color de un melón bien maduro. Se sienta en el borde
del alimentador con su esposa regordeta, y las ardillas,
¡no sabés también lo lindas que son! Se paran en dos patitas
y comen con las delanteras como si tuvieran manos, y ¡¡cómo comen!!
Me hice sacar el diente que no sangró para nada.
6
La verdad que es sorprendente lo bien que está tu madre,
aunque se olvida de tomar sus laxantes va de cuerpo regularmente.
Ahora que podemos tener todas las ventanas abiertas dice que le
encanta que los pájaros canten el día entero. La muchacha tomó prestado
el Lo Sé Todo de la biblioteca y estoy leyendo todo
sobre el hábito de los pájaros. ¿Sabías que algunos machos tienen tres esposas,
que algunos migran y que otros no? Voy a seguir alimentándolos
por el resto de la primavera, y el verano tal vez, ya que uno
puede ver cada día cómo están esperándonos. Vamos a tener que buscar
semillas especiales para el Pinzón Dorado y para el Pinzón de los Pinos
en el próximo invierno. Algunos vecinos de la parroquia están
por venir a visitarnos: son amantes de los pájaros.
También tienen sus pájaros pero nada que se le parezca a este espectáculo.
Así que el mundo reúne a sus hijos para darles el beso de las buenas noches.
Objetos y fotos: Dasbald
octubre 2, 2007 a las 12:04 am
y esos niditos????????????? yo quiero dormir ahi!